A partir de 1628, paralelamente al proceso realizado en Sevilla para la Canonización de San Fernando, se fue gestionando la idea de crear una imagen del Monarca que oficialmente le ensalzara como rey y como santo. En 1630, mientras en Sevilla se festejaba la proclamación de la Bula Remisorial, en Roma el licenciado Bernardo del Toro, agente particular de Felipe IV en dicha causa, obtenía licencia para estampar una imagen de Fernando III ya con atributos de Santo. Es así como se realiza la Primera Imagen Oficial de San Fernando, fechada en Roma en 1630. Se ignora quien fue la persona que configuró dicha imagen, aunque sí sabemos quien fue su grabador puesto que la Firma C. Audram, aparece en ella, firma que corresponde a Claude Audrane el viejo. Iconograficamente nos presenta a Fernando III de pie, vestido con armadura y cubierto con la real capa de armiño. Sobre su cabeza, que lleva halo de santidad, la corona real cerrada, mientras que en sus manos porta respectivamente la espada y el globo.
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